
Miami no es solo un destino turístico, sino el principal centro de inversión inmobiliaria de EE. UU. para el capital internacional, especialmente de América Latina. Este flujo constante de fondos actúa como un hedge (cobertura) contra la inestabilidad global y la devaluación monetaria, fortaleciendo la base de precios de las propiedades de lujo.
La inversión extranjera sigue siendo un motor vital del mercado, concentrándose fuertemente en Florida. Según el 2025 Miami International New Construction Report, el 49% de las nuevas propiedades construidas en el Sur de Florida fueron adquiridas por compradores internacionales. La dominancia de la región latinoamericana es incuestionable, representando el 64% del total de compradores internacionales en nueva construcción.
Los principales países de origen que buscan resguardo en dólares son: Argentina (17%), Colombia (15%) y Venezuela (12%).
Un dato crucial que subraya la seriedad de esta inversión es que el 90% de estas compras internacionales en nuevas construcciones se realizaron sin necesidad de financiamiento hipotecario estadounidense. Adicionalmente, los compradores extranjeros demuestran una clara preferencia por la calidad, pagando un precio medio de venta que es hasta un 15% superior al promedio del comprador local, tal como lo indica BAI Capital.
Miami es un puerto seguro estratégico que ofrece al inversor internacional dos ventajas clave:
- Optimización Fiscal: Florida, al ser uno de los pocos estados sin impuesto estatal sobre la renta (income tax), ofrece ventajas significativas para estructurar legalmente la inversión y maximizar el rendimiento neto por alquiler o futuras ganancias de capital, siempre que se cuente con la debida asesoría fiscal.
- Preservación de Patrimonio: Invertir en bienes raíces de lujo en dólares, en una jurisdicción estable y bajo el marco legal de EE. UU., protege el capital de la volatilidad política y económica de otras regiones. Más del 70% de estos compradores internacionales planean mantener su propiedad por más de cinco años, evidenciando una estrategia de preservación de capital a largo plazo.